martes, 18 de agosto de 2009

Breves anotaciones en un celular

I

Qué problema
de nuevo preso de la mente,
creí haber logrado olvidar el deseo
y aquí estoy, enterándome
de que volveré solo
y que fue inútil correr al encuentro

(16/8/09)


II

Ellos hacen lo mismo que hacíamos,
ellos son ellos, el tiempo
que cayó de repente,
ellos son vos, y yo
miro queriendo,
miro sintiendo que soy
y que no pertenezco

(9/8/09)


III

Algo entre la marea de cuerpos,
me dice que no pertenezco,
que abandoné mi pasado
aunque siga viviendo.

Algo de todo esto era mío,
allí estaba yo, también,
allí buscaba, y allí había:
hace mucho, mucho tiempo.

(9/8/09)


IV

No puedo decir que te amo
(a esta altura amar es una quimera),
tanto sufrimiento antes, tanto
pasó antes que naciéramos
que el mundo parece inmenso,

y amarte es inútil
si no das un leve movimiento,
un sencillo motivo,
un convencimiento,
algo que redima a los vivos
y que alivie mi cuerpo.

(9/8/09)


V

Así de fácil, la vida

Así de fácil, entre ellos

Así estoy, afuera

Así camino, así distancio
el ser, el cuerpo.

(24/7/09)


VI

De repente
–así, de repente–
me sentí solo
sin vos ni vos ni vos
estuve solo
–yo, conmigo–

más solo

sentándome
a ver la vida pasar

(29/3/09)


VII

Cómo retenerte,
cómo cristalizar un momento
cuando apenas nos vemos
cuando siquiera animamos nuestros miedos
para reconocernos.

No sé si podré seguir:
soy cansancio en el tiempo.

Sabrás que estuve
por estos versos.

(8/3/09)


VIII

Sospechaba
que no verte me haría bien,
suponía
que el olvido era suma de ausencias y de días,
y acá estoy
rodeado
de fantasmas de temores
de chispazos
como cuando empecé;

y amándote tanto

y temiéndome

y esperando

(8/3/09)

No hay comentarios:

Publicar un comentario