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jueves, 10 de abril de 2008

NOVELA (DUODÉCIMA ENTREGA)

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XXX
Epílogo

La novela como género, en su génesis, tuvo un fuerte correlato con la moral y con la enseñanza. La novela fue, debe ser, una escritura didáctica, a pesar de que los intentos postmodernos intenten vaciarla a una pura forma novedosa, o con pretenciones de tal.

Cuando la desgarbada caligrafía del manuscrito de esta novela llegó a nuestras manos, no vimos tanto las destrezas verbales (que no las hay) como las posibilidades éticas que la trama abre. Gonzalo Coronel es un símbolo de todas las amenazas a que una sociedad se enfrenta día a día, y desde allí nos viene a mostrar todo lo que falta hacer para depurarnos como comunidad, para proveernos de los anticuperos que necesitamos para una convivencia democrática con orden y respeto.

Toda novela es política, en definitiva, y esta nos viene a cuestionar en nuestra organización, en nuestros modos de comunicarnos, en nuestros modos de proceder. Y toda novela nos viene a enseñar, a partir de una ficción, cómo somos, cómo deberíamos ser, cómo fuimos.

Alonso Quijano le gritó al siglo XVII español sus verdades, con la pluma genial del Manco de Lepanto. Aquí no tenemos, repetimos y lo sabemos, el cásico del siglo XXI pero tenemos, eso sí, nuestra realidad, nuestro siglo, en su cruda rudeza e inequidad. Los más tenemos que cuidarnos de los menos, y nos contentamos con verlo por tevé. El Quijote provocó poner en agenda las cuestiones que la España del 1600 necesitaba discutir; esperamos que esta sencilla novelita, en cuya superfice, sólo en su superficie, parecería ser una trágica y repetida historia de amor, facilite –al menos facilite– la reflexión acerca de nuestra época, y nuestro país.

El editor

2 comentarios :

  1. Hola Esteban´
    No acuerdo con vos qué,tu novela, es una novelita.Es la novela de por qué no ,la novela de la vida de muchos que nunca serán escritos por ser anónimos .
    No sólo serán anónimos a los escritos,de un escritor joven,creativo,provocativo y con esas,sus provocaciones ,pone vida a muchos sin vida.
    Si anónimos a los ojos de los otros y muchas veces a sus propios ojos.
    Esta novela pone al descubierto que el amor,la falta de amor es lo que nos margina.Además de señalar lo pulsional que está presente en cada uno de los personajes,dónde la moral está atada a lo que se vive.
    Me encanta el desencanto,qué en algunos capítulos ,nos brindo.
    Felicitaciones,genio.!!!
    Silvia

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  2. Y sí, intenté decirle al editor que no fuera tan despectivo, pero no me hizo caso, mierda carajo...

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